Afrontaba mi primera experiencia de nado en aguas abiertas con mucha ilusión y sobre todo como una prueba para ver la evolución de mis entrenamientos en piscina. La idea era familiarizarme con las aguas del sitio donde también se realizará la prueba de natación del Triatlón de Pareja el próximo 27 de Agosto, triatlon en el que hasta hoy pensaba debutar.
El calentamiento fue bien, me encontraba ligero y con piernas y brazos a tope después de haber descansado el día anterior. La diferencia a nadar en piscina es clara, dejas de tener referencias y la visibilidad dentro del agua es nula.
Nos situamos en segunda línea de salida mi hermano y yo, sin agobios. Pistoletazo de salida y salto al agua. Las gafas se me llenan de agua, me paro, lo soluciono y empiezo a nadar. Desde el principio la respiración sin controlar, creo que llevaba unas pulsaciones altísimas y en 100 metros me encuentro muy cansado. Decido no seguir la estela de nadie e intentar coger mi ritmo pero no lo consigo. Es como si mi cuerpo pesará 200kg y mis brazos y piernas no tuvieran ni un ápice de fuerza. Me agobio muchísimo, empiezo a pensar en que no voy a poder acabar la prueba, ¿qué me pasa??, desde el principio he ido tranquilo y estoy agotado!!!!.
Pasamos la primer boya y la cabeza se motiva pensando que queda menos de la mitad, antes de finalizar tengo que nadar incluso a braza, pufffff, mi cabeza se bloquea y sólo quiero que termine este sufrimiento.
Una vez fuera del agua no paro de preguntarme que me ha podido pasar, nervios de competición quizás, intentar seguir la estela de otros nadadores o peor todavía, quizás me falta entrenamiento.
Todavía no conozco el tiempo. es inevitable pensar que si me ha costado terminar 500m, ¿cómo coño voy a afrontar los 1.500m del triatlon?, en esos momentos decido que lo veo muy lejos, que quizás tengo que prepararlo más a conciencia..., en fin, nos ponemos en marcha con la bici para iniciar la vuelta con no demasiadas ganas ya que la cabeza la tengo en la natación.
La bici muy bien, realizamos la vuelta por la N-320 en su mayoría del recorrido y con muy buenas sensaciones. Un total de 52 km en algo menos de 2h.
Mi hermano y yo. El brother me dio pa´l pelo
Después de la ducha en casa, mis inquietudes seguían rondando mi cabeza. Tengo todas las dudas del mundo, pero en vez de abandonar me he apuntado a la travesía de Pálmaces del sábado que viene donde estoy seguro que encontraré mi nivel de natación acorde con los entrenos. Veremos que pasa.
